Son infecciones causadas por virus, bacterias, hongos o parásitos. La forma de transmisión es a través de la práctica del sexo vaginal, anal, oral sin protección con una persona portadora de alguna ITS, ya que estos microorganismos viven en los fluidos corporales como la sangre, semen y secreciones vaginales. Afectan a los órganos genitales y se pueden localizar en otros lugares, en particular en la boca y en el ano.Muchas de ellas no presentan síntomas, lo cual hace que el diagnostico sea tardío y se favorezca su transmisión. Además, la presencia de una ITS sin diagnosticar, aumenta el riesgo de transmisión del VIH durante un contacto sexual sin protección.
Las ITS siguen representando un importante problema de salud pública, con grandes repercusiones a nivel sanitario, psicológico, social y económico.
Es importante que tengas en cuenta que:
- La mayoría de las infecciones pueden contraerse más de una vez, es decir puedo volver a reinfectarme de la misma o de otra ITS si no utilizo medidas de protección, o no me realizo controles periódicos.
- La transmisión de las mismas es en cadena, es decir la persona afectada puede transmitir la infección a otras muchas personas y estas a su vez, originar nuevos contagios.
- Favorecen la transmisión del VIH, es decir aumentan el riesgo de transmisión del VIH.
Entre los más de 30 virus, bacterias y parásitos que se transmiten por contacto sexual, ocho se han vinculado a la máxima incidencia de infecciones de transmisión sexual (ITS). De esas ocho infecciones, cuatro son actualmente curables: la sífilis, la gonorrea, la clamidiasis y la tricomoniasis. Las otras cuatro: hepatitis B, virus del herpes simple (HSV o herpes), VIH y virus del papiloma humano (VPH), son infecciones virales incurables, aunque existen tratamientos capaces de atenuar o modificar los síntomas o la enfermedad.
SIFILIS
La sífilis puede cursar con diversos síntomas a lo largo de los años. Inicialmente lo más llamativo es la aparición de una ulcera, generalmente indolora, que puede pasar inadvertida. Si no se trata la enfermedad avanza en otras fases que afecta a sistemas y órganos importantes del cuerpo.
GONORREA
Los síntomas pueden ser precoces en el tiempo. Los más frecuentes son el aumento del flujo vaginal, las secreciones en el pene y/o ano, el escozor al orinar y molestias en la faringe.
CLAMIDIA
Es frecuente que no existan síntomas y en el caso de existir, pueden ser ardor o escozor la orinar, secreciones vaginales o anales.
HEPATITIS
Los virus A, B y C causan la hepatitis siendo la hepatitis B, la que más frecuentemente se trasmite por vía sexual. La sintomatología más común es malestar general, vómitos, delgadez coloración amarilla de la piel y del blanco de los ojos (ictericia). Hay vacunación eficaz para las hepatitis de tipo A y B.
La hepatitis C se transmite, principalmente, por vías distintas a las relaciones sexuales, sin embargo, el contagio sexual de la hepatitis C ha aumentado en los últimos años afectando a hombres que tienen sexo con hombres, lo que indica que la penetración anal presenta un riesgo aumentado. El consumo de drogas por vía parenteral, e incluso por otras vías (consumo cocaína vía nasal compartiendo “rulo”) parecen ser otras vías importantes de infección por el virus de la hepatitis C.
VIRUS DEL PAPILOMA HUMANO (VPH)
Esta infección vírica se manifiesta en forma de verrugas en genitales o zona perianal. Algunos tipos están relacionados con la aparición de cáncer por ello es muy importante la vacunación.
La infección no tiene tratamiento, solo la eliminación de las lesiones en la piel mediante láser.
VIRUS DEL HERPES SIMPLE (VHS)
Es una ITS de origen vírico que afecta a los genitales, ano y boca. El virus queda alojado permanentemente en el organismo apareciendo ulceras y vesículas dolorosas de forma intermitente. Solo tiene tratamiento sintomático de las lesiones.
VIH
El VIH o Virus de la Inmunodeficiencia Humana es un retrovirus que ataca al sistema inmunitario de la persona infectada, destruyéndolo de forma gradual. En concreto, el VIH ataca y destruye los linfocitos CD4, que se encargan de la fabricación de anticuerpos para combatir las infecciones causadas por estos agentes externos.
VIH y sida no son sinónimos, tener VIH no significa tener sida. Tener el VIH significa que el virus está en tu organismo multiplicándose, lo que provoca que tu sistema inmunológico se debilite, pero no necesariamente que desarrolles una enfermedad.
Sin un tratamiento médico adecuado puede aparecer el Sida (síndrome de la inmunodeficiencia adquirida) que es un conjunto de manifestaciones clínicas que aparecen cuando la inmunodeficiencia que provoca la infección del VIH es muy acusada, y nuestro sistema inmune es incapaz de defender a nuestro organismo. En la historia natural de la infección por VIH, el sida es la etapa más grave, y se caracteriza por la presencia de ciertas enfermedades oportunistas o neoplasias que pueden amenazar la vida de la persona.
LADILLAS
Esta producida por un parásito. Aparece un picor intenso en la zona del pubis, perineo y otras zonas corporales con pelo. Utilizar un tratamiento médico adecuado más rasurarse la zona y lavar las prendas infectadas con agua caliente ayuda a su erradicación.
Actualmente, existe un incremento de la sífilis y de la gonorrea en hombres que mantienen sexo con hombres.
Todas las personas sexualmente activas están expuestas, especialmente, sin las medidas de prevención adecuadas, a una posible infección. El hecho de que algunas infecciones se transmitan por contacto piel/mucosas con piel/mucosas hace complicado tener una relación sexual totalmente protegida.
Las probabilidades de adquirir o de transmitir una ITS pueden variar dependiendo de diferentes factores como el tipo de ITS, el tipo de práctica sexual y el uso de elementos de protección.
Las infecciones de transmisión sexual se transmiten, principalmente, en las relaciones sexuales con penetración (ya sea vaginal, anal, así como, por las relaciones de sexo oral). Además, algunas de estas infecciones pueden transmitirse también por contacto sexual sin necesidad de penetración.
El Herpes genital/oral, las verrugas genitales o condilomas y la sífilis, se transmiten por contacto directo con las áreas de la piel o de las mucosas afectadas por la infección. Se transmiten muy fácilmente si no se utiliza un método de barrera.
Tanto el VIH, como las hepatitis A y B, la gonorrea (infección por gonococo) y la infección genital por clamidia, se transmiten por intercambio de fluidos corporales como semen, secreciones uretrales o secreciones vaginales. La gonococia y la clamidia se transmiten también con penetración exclusivamente oral.
La Sarna y la pediculosis pubis (ladillas), se pueden contagiar por contactos corporales íntimos o mediante ropas infectadas.
Algunas de estas infecciones pueden transmitirse por otras vías distintas de las relaciones sexuales:
La hepatitis B y C el VIH. Estas infecciones también se pueden transmitir a través de la sangre de una persona infectada o por el hecho de compartir material de inyección de drogas o fármacos o hacerse tatuajes o piercings con material no esterilizado.
La mayoría de las infecciones de transmisión sexual se pueden contraer más de una vez siempre que la persona vuelva a estar expuesta a dicho microorganismo, ya que el sistema inmune no crea unas defensas adecuadas contra estos.
Muchas ITS se transmiten de manera similar, a través de las siguientes prácticas de riesgo:
- Penetración anal. Comporta un riesgo mayor de contagio para algunas infecciones (como la infección por el VIH) que la penetración vaginal si no se usa protección.
- Penetración vaginal sin uso del preservativo.
- Sexo oral. Muchas ITS (virus herpes, verrugas genitales, gonorrea, clamidia, sífilis) pueden transmitirse con una relación, exclusivamente, de sexo oral, aunque el riesgo es menor que con la penetración anal o vaginal.
- Compartir juguetes o materiales sexuales utilizados durante las relaciones sexuales. En los juguetes sexuales se adhieren fluidos que pueden ser vehículos de transmisión si se intercambian de persona a persona sin utilizar ningún tipo de barreras protectoras.
- Abuso de alcohol y otras drogas, ya que, si se tienen relaciones sexuales con penetración bajo sus efectos, disminuye la percepción del riesgo y el uso de medidas de protección.
- Los besos en la boca o el contacto íntimo (caricias, masajes, masturbación mutua…) conllevan un riesgo de transmisión mucho más bajo que las prácticas sexuales con penetración y no comportan riesgo con respecto a infecciones como el VIH o la hepatitis
Los besos, los abrazos, las caricias, las risas, el cariño, la ternura, son relaciones sexuales con muy bajo riesgo. El respeto, el cuidado mutuo, el uso de protección en las relaciones de riesgo, las relaciones deseadas y agradables, eso es el sexo seguro, el buen sexo que nos hará disfrutar protegiendo nuestra salud.
Generalmente tras la relación de riesgo, no aparecen síntomas o bien son escasos y poco expresivos, lo cual facilita la transmisión de la infección a otras personas y dificulta el diagnostico. En este último caso, pueden aparecer complicaciones posteriores a nivel de salud, si no se tratan a tiempo y de manera adecuada.
Si notas cambios de color, olor o cantidad en tu flujo vaginal, secreción uretral, picores, dolores en el pene, ulceras, lesiones, ampollas, verrugas, heridas en tus genitales o dolor abdominal, entre otros, igual puedes haber contraído alguna ITS.
Las ITS no producen inmunidad por lo que puedes reinfectarte varias veces en la vida. Además, tener una ITS aumenta el riesgo de infectarte o de transmitir el VIH a tus parejas sexuales si no utilizas protección. Por ello, es necesario que si presentas algunos de los síntomas reseñados acudas a un recurso de salud a realizarte las pruebas diagnósticas pertinentes
Cualquier persona sexualmente activa puede tener una infección si no usa protección en las relaciones sexuales de riesgo.
¿Cómo puedo saber si he contraído una ITS?: Para saberlo, únicamente tendría que hacerme una prueba específica para saber el diagnóstico, mediante extracción de sangre o tomando muestra de las secreciones genitales o de orina. Estas pruebas me las pueden realizar en el centro de ITS (¿Dónde acudir?).
¿Qué hacer si me diagnostican una ITS? Comenzar con el tratamiento médico, que la/s persona/s con la/s que he mantenido contactos sexuales inicien también el tratamiento, así se descarta la reinfección y rompemos la cadena de transmisión. Sería una buena práctica de salud sexual.
Ten en cuenta lo siguiente:
- Sé responsable de tu salud y sigue la pauta indicada.
- Busca atención médica: ve a tu Centro de Salud lo antes posible (enlace a donde acudir)
- Como alternativa inmediata, consulta a recursos comunitarios o especializados (enlace adonde acudir )
- Avisa a tu pareja y/o a las personas con las que hayas tenido relaciones sexuales sin protección para que reciban atención sanitaria.
- No tengas relaciones sexuales sin protección mientras estés en tratamiento.
El diagnóstico es sencillo por pruebas de sangre, orina o de secreciones anormales.
Casi todas las ITS tienen tratamiento. Lo más importantes es recibir un diagnóstico acertado y seguir el tratamiento médico y las recomendaciones del personal sanitario hasta la finalización del mismo.
Si eres una persona sexualmente activa, sería conveniente que te realices controles periódicos de salud y pruebas de ITS, al menos una vez al año.
En nuestra sociedad, practicar SEXO y cuanto más mejor, con cuantas más personas mejor, se ha convertido en un objetivo a cumplir, accediendo a una sexualidad finalista y poniendo el sexo como un medio o un instrumento. No olvides que, las relaciones sexuales son posibilidades para disfrutar, para compartir, para descubrir y para ser gestionadas de manera saludable.
El sexo no es únicamente lo que hacemos, las prácticas sexuales o cuestiones genitales, tiene que ver con lo que somos, con nuestra identidad y con nuestros deseos…Por ello el secreto para tener un “buen sexo” es el autocuidado, quererme, respetarme, tomar conciencia de mi cuerpo, de mis emociones, de mi erótica y maneras de expresarme y de mis preferencias sexuales.
El riesgo cero no existe, pero sí existe la posibilidad de poder elegir cómo y cuándo quiero protegerme, practicar el autocuidado y el consentimiento tener en cuenta mi deseo y el de la otra persona. Y mirar más allá, abrir mi mente y mis sentidos: las relaciones sexuales no son únicamente la práctica del coito.
Y tener presente que no tengo que llevar a cabo ninguna práctica sexual que me haga sentir incomodidad o que no me apetezca.
La forma de prevenir las ITS es, practicando el buen sexo, el sexo seguro. Es decir, teniendo en cuenta las medidas preventivas existentes y manteniendo prácticas sexuales que impidan la transmisión de ITS (prácticas de riesgo).
El buen uso del preservativo masculino y femenino, reduce eficazmente el riesgo de contraer una ITS (buen uso del preservativo).
El uso del preservativo en las relaciones que implican penetración (anal, oral, vaginal) es una elección que puede resultar placentera y divertida. Ni el amor ni el cariño protegen de las ITS. El uso sistemático del preservativo alimentado con lubricante reduce de manera significativa el riesgo de contraer una ITS. Úsalo en todas las relaciones desde su inicio hasta el final.
La utilización correcta de lubricante puede favorecer unas relaciones sexuales más placenteras. En el caso de los espermicidas aumentan la eficacia del preservativo.
En el caso de las relaciones sexuales orales también existe riesgo: en el caso de personas con pene, utilizar el preservativo colocado en el mismo para practicar una felación y en las personas con vulva, para practicar un cunnilingus, el uso de láminas de látex sirven de barrera en la boca y los genitales impidiendo la infección.
Ello es importante sobre todo para evitar la transmisión de la gonorrea y la sífilis mediante el sexo oral.
Si eres una persona sexualmente activa, sería conveniente que te realices controles periódicos de salud y pruebas de ITS, al menos una vez al año, como forma de prevenir futuras transmisiones, ya que hay muchas ITS que no presentan síntomas de manera inmediata, lo cual facilita la propagación de la infección. Sería conveniente que tu /s parejas sexuales también se lo realicen. Así nos cuidamos y cuidamos nuestra salud y la de otras personas.
La estabilidad de la pareja ofrece una falsa sensación de protección frente a las ITS. Por ello es muy importante que sigáis utilizando el preservativo en todos vuestros encuentros sexuales hasta que las dos personas os hayáis realizado las pruebas necesarias y se haya descartado tener alguna ITS.
Disfruta de las relaciones sexuales, sin que suponga un riesgo para tu salud para ello valora el riesgo de tus relaciones y protégelas.
Nuestra salud sexual y nuestro placer es nuestra responsabilidad. Vivir nuestra sexualidad libre de riesgos de ITS, de relaciones no deseadas…está en nuestras manos.
Busca, escucha, habla, trasmite, comparte la INFORMACIÓN, porque evita preocupaciones, ayuda a tener una sexualidad sana, hace que disfrutes más y hagas disfrutar. Te aleja de las ITS. Te abre la mente
Por ello, practica el autocuidado y hazte controles periódicos acerca de tu salud sexual, ya que, si se detectan a tiempo, el diagnóstico y el tratamiento es sencillo y eficaz.




